Se acabaron las vacaciones de semana santa. Nos toca regresar a los quehaceres diarios. ¿Y no sé si os habéis dado cuenta al regreso? Todo sigue igual que antes de salir de viaje. Los políticos, en España, que no se ponen de acuerdo para formar gobierno. En Europa, políticos, cerrando fronteras y sin saber qué hacer con esos miles de desplazados por culpas de guerras que han montado desde cómodas poltronas en el mundo civilizado. La crisis… Pero los bancos ganado más dinero que nunca. Atentados terroristas por diversas partes del mundo y...

Es hora de volver a la tarea. A nosotros nos esperan nuevas salidas. Ya tenemos cerrada la próxima aventura en Egipto. Pero antes, un salto a los EEUU. Para sentir que ocurre en la ex capital del imperio. Y en medio de todo ello, nuevos misterios por descubrir. Nuevos invitados que se acercaran a este espacio en blanco que abrimos cada semana al universo.

Resaltar algunas de las comunicaciones que nos mandáis. Una es de un grupo de jubilados que nos escuchan. Pero… les asustamos con las músicas que ponemos al final del programa. A veces, se quedan dormidos en los últimos minutos, y la música, “estridente y marchosa”, según ellos, les despierta sobresaltados a punto del infarto. Y como no queremos eso... suavizaremos nuestras músicas de despedida...

Músicas que necesitamos para dejar hueco a los siguientes compañeros que llegan al estudio que utilizamos y, para recoger los trastos del programa. Aun así: Tomamos nota... Aquí se respetan las canas y, a los mayores, todo, que se lo merecen. ¡Qué tiernos!

Nos gustaría ser como esos pueblos en los que a los mayores, se les reserva lo mejor, los mejores lugares en la mesa y en la casa. Se les escucha, y se les tiene en cuenta sus opiniones. No como nuestro mundo, que los confina en: “residencias de ancianos” para que no den la lata ni molesten. A nosotros, nos gustaría que nuestros mayores, fueran felices y, si podemos, haremos lo posible para que lo sean. Así que tomamos nota de ese consejo. Y, ¡gracias por la escucha y compañía!

Por el momento, nos quedamos a la espera de la primavera. A ver si ya se asienta en nuestros lares y nos da color, calor y el ejemplo de la vida que renace.